Reseña: El Legado de Christopher Paolini.

Comenzamos esta aventura cuando Eragon va al bosque a cazar venados para tener comida en el invierno, mientras el intenta cazar algo ocurre una explosión y aparece una piedra azul en medio de todo el alboroto. Obviamente, no puede cazar y se va a su casa con las manos vacías y planes de vender la piedra. Creo que todos conocemos lo que sucede después, una Dragona emerge de esa piedra extraña y Eragon es el jinete de dragones que todas las personas esperaban para liberar a toda Agalaesia de las manos del oscuro gobernante, Galbatorix.

Lo que no solemos ver es que Eragon es solo un niño, tiene quince años y con esta edad debe aprender como sobrevivir en un mundo que no conoce, deberá aprender los conocimientos de la magia, a leer, a desenvolverse como luchador, además claro que es el embajador entre todas las criaturas que están en Agalaesia y territorios adyacentes; pero más que esto, deberá crecer sabiendo que nada será igual a su vida pasada, que ahora todo ha cambiado y que él es la clave para ganar o perder la batalla contra Galbatorix y Shuikan, su dragón.

A medida que los libros avanzan la historia se desarrolla en torno a Eragon y a su primo Roran, quienes deberán entender que sus acciones pueden afectar a las personas de su entorno.

Aventuras, luchas, batallas, traiciones, muertes, corazones rotos. Esto y mucho más deberán enfrentar para poder tener paz, pero, ¿podrán hacerlo, o solo serán otras personas que intentaron y no lo lograron?

No puedo ser objetiva y criticar a conciencia estos libros, simplemente no puedo. Le tengo mucho cariño a esta Saga, ya que fue la narración de Christopher Paolini lo que me llevó al mundo de la lectura. Sé que el primer libro lo escribió siendo un niño y su forma de escribir dejaba mucho que desear, Eldest se asemeja mucho a Eragon en este sentido, pero a medida que avanza la historia se hace mejor. Cuando terminé Brisingr no sabía que pensar, era el mejor libro que había leído para ese entonces, lleno de emoción, de aventuras sin perder la trama, recuerdo que para esos días una persona que era muy cercana a mi había traicionado mi confianza y lloré como nunca cuando leí el tercer libro, puesto que Eragon se sentía igual y podía desahogarme mediante la lectura. Pasó casi un año para leer La Cripta de Las Almas, y fue el primer libro que esperé la publicación y que lo tradujeran. Cuando lo pude leer desde el lector de la pc estaba flipando, recuerdo que no dormí durante casi dos días con tal de terminarme el libro. Al cerrar las páginas de el cuarto y último libro lloré de alegría, de tristeza porque sabía que no saldría un quinto libro, también lloré porque entendí muchas cosas de la vida, entendí que para obtener los objetivos que nos planteamos hay que hacer sacrificios.

Amo estos cuatro libros y por esto es que no me considero la persona indicada para dar una reseña crítica de estos libros.

En esta saga se puede observar el cambio que ocurre cuando crecemos, como pasamos de ser niños a ser mayores.
La trama es genial, y a mi parecer está muy bien desarrollada.
Amo la fantasía épica, me encanta leer las descripciones de batallas.