Oficina número uno es la continuación de Casas Muertas. Si lo has leído, sabrás que Carmen Rosa, su mamá y el cuidador se fueron de Parapara de Ortiz; llegaron a un pueblo, cerca de los campos de explotación petrolera.
En este libro, se expone como el paso de los años deja huella en los habitantes. A diferencia del anterior, ya Carmen Rosa no tiene idea sobre lo que hará con su vida.
El pequeño pueblo comienza a crecer, cada vez llegan más personas. Me impresionó saber que una de las primeras cosas que montaron fue un bar, luego una iglesia, además de unas posadas, y por último, una pequeña escuela. Claro, a medida que pasó el tiempo, habían más casas, la explotación petrolera hizo en Venezuela una época de mucho derroche, y aquí se puede notar esto.
- Otro libro iberoamericano. A diferencia de otros, este es muy interesante, claro, hay que tener en cuenta el vocabulario algo complejo.
- Me gusta la historia, como se desarrolla, los ejemplos que utilizan, es genial.
- Es un libro interesante.
Quieres leer algo de historia, pero contada por un excelente escritor.
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